En España, la normativa de sanidad no permitía hasta 2008 emplear polímeros derivados de productos reciclados para fabricar envases que estuvieran en contacto con los alimentos. Para adaptarse a la normativa europea se aprobó a nivel nacional el Real Decreto 866/2008, que sí permite el empleo de plástico reciclado para fabricar envases para la industria alimentaria. Las empresas que empleen materias primas procedentes de las plantas de reciclaje deberán, no obstante, ajustarse a lo estipulado por la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA).
En concreto esta normativa permite hoy en día a la industria el empleo de Polietileno Tereftalato reciclado (R-PET); este es un avance notable en las políticas de reciclaje que permite cerrar en mayor grado el ciclo de la materia y además favorece al consumidor al reducir el precio final de los envases. Las empresas españolas comienzan a aprovechar este marco legal sostenible, como se puede comprobar en los nuevos spots con etiquetas “ecoligeras”.
No obstante, no existe todavía en España ninguna planta de reciclaje con el certificado de homologación de la EFSA, lo que obliga a las empresas alimentarias españolas a importar los productos de Francia o Alemania para incorporar materiales reciclados en los procesos de fabricación de los envases.
Más información en:
Eco Lab:
http://blogs.elpais.com/eco-lab/2010/05/una-botella-de-agua-mas-ecologica.html#more
Real Decreto 866/2008
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